Muchas veces es difícil encontrar las palabras más apropiadas para poner nombre a cada una de las sensaciones que experimentamos a lo largo de nuestras vidas.
Complicado también que esas sensaciones logren traspasar y llegar a otras personas.
Con películas como "Los Santos Inocentes" ese latir lejano de un vibrar común se vuelve algo sencillo y cercano. Quienes la hayáis podido ver sabréis que esto es cierto. Incluso os quedarán ganas de repetir una y otra vez, Azarías y el señorito Iván bien lo valen. Obligada mención también a Delibes, sin él no hubiera sido posible.
Es quizás con el paso del tiempo que la disfrutas aún más si cabe, y piensas: "¿qué importa si no es una milana?"
Bonita y más, brutal y salvajemente bella obra maestra, retrato de unos personajes que os emocionarán.
¡MILANA, MILANA BONITA!
Nuestro recuerdo al señor Don Paco Rabal |
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