Para aquellos que decidieron caminar sin rumbo fijo y aterrizaron en un lugar como éste. Aquí tenéis vuestro sitio.

martes, 31 de octubre de 2017

Blaculín y Chirivitas ¡De Halloween!

Ya ha llegado la noche más horrorífica
y diverespeluznante del año
¡Y toca pasarla de miedo en compañía
de todos nuestros amigos!




Y es que Halloween, como cualquier otra fiesta,
se disfruta mejor compartiendo con los seres queridos...







En nuestro blog Un Ambientalista encontraréis muchas ideas
para disfrutar la noche de Halloween ¡No dejéis de verlas!





lunes, 30 de octubre de 2017

Hoy visitamos...

Este fin de semana nos hemos dado el capricho de visitar el Parque Warner, en San Martín de la Vega. Habíamos visto en la red todo tipo de comentarios, desde los que denigraban el sitio hasta los que lo ensalzaban, y ahora podemos dar nuestro propio punto de vista.

Empezaremos diciendo que, aunque hay algunos aspectos mejorables, fue un gran día. Nos lo pasamos realmente bien y disfrutamos cada momento. Previendo que el sitio se llenaría de gente, fuimos bien prontito: una hora antes de que abrieran, ya estábamos esperando en la puerta del aparcamiento. Tampoco es que nos sirviera de algo, porque en cuanto se puede pasar, el lugar se convierte en un "sálvese quien pueda" para aparcar y lanzarse hacia las taquillas. Aquí está el primer punto criticable, a nuestro juicio, sobre todo para los que van por primera vez. Hay mucha desorganización, porque se juntan en un mismo sitio los que sacan la entrada en el día, los que la han sacado on-line, los que tienen pase de varios días y los que tienen pase de grupos. Si a esto le añadimos que no todas las taquillas abren a la vez, se crea una sensación de "no sé si estoy en la cola correcta" bastante molesta. Además, como tardan en abrir las puertas, se forma un tapón considerable...

Sin embargo, una vez que se pasa este "mal trago", la cosa cambia radicalmente. Entrar en el Parque Warner es como llegar a un mundo aparte. Los decorados están realmente chulos, y nada más llegar hay una pequeña actuación de bienvenida a lo Halloween. Mucha gente vino disfrazada, añadiendo más colorido al lugar, mezclándose con los propios personajes del parque. En él hay varias zonas temáticas, todas muy bien ambientadas, llenas de rincones para hacerse fotos.

Si uno se organiza bien, puede asistir a la mayoría de los espectáculos. Nosotros pudimos ver la actuación de Loca Academia de Policía (espectacular), el pase de un corto de animación en el Teatro Chino (¡con gafas en 3D!) y el de Batman (también muy aconsejable). La pega es que como se llenan de gente hay que estar pendiente de llegar con cierta antelación, o te quedas sin verlos.

En cuanto a las atracciones, de las que más hay son las infantiles, pero para los más atrevidos tenemos algunas verdaderamente cardiacas, como la de Superman o el Arkham Asylum (una montaña rusa que puedes recorrer con gafas de realidad virtual). Damos fe que no dejarán indiferentes. En el mapa que dan a la entrada clasifican todas las atracciones en niveles (infantil, medio y extremo), así que podremos elegir con criterio. No nos tocó esperar demasiadas colas, quizás porque fuimos en buen día.

Para comer, hay sitios chulos y de escenario pintoresco, aunque los menús no sean precisamente sanos, tirando más a la línea de perrito caliente, pizza o carne a la brasa. Pero en fin, un día es un día...

El que quizás es el peor "pero" es el precio. Las entradas son muy caras, si no has conseguido ninguna oferta especial en internet. Existen unos extras que podemos añadir a la entrada básica, llamados "pases Correcaminos", que nos permiten reducir mucho los tiempos de espera en las colas, pero nos elevan la entrada desde casi cuarenta euros hasta casi setenta. Nosotros, desde luego, no los echamos en falta. La comida y cualquier bebida que quieras coger tienen precio de escándalo. En las normas se indica que está prohibido meter comida y bebida de fuera, pero vimos casos de personas que habían conseguido sortear los controles de mochilas, y sinceramente, no los podemos culpar. Comprendemos la política del Parque, que quiere que se compre dentro de sus puertas, pero sus precios abusivos son los que propician estas actuaciones. Del mismo modo, si las entradas fueran más asequibles, uno se podría plantear una visita a la Warner como una alternativa de "un fin de semana al mes", en lugar de "una vez está bien".

Dicho todo esto, y una vez que nos mentalizamos de que se podía hacer un sacrificio monetario, repetimos que pasamos un día genial. Para los niños, sobre todo, es un lugar mágico, y solo hay que verles sus ojillos sacándose una foto con Supermán o Flash, o chocando los cinco con Scooby-Doo, para olvidarse de todos los "puntos feos" y volver a ser niños por un día.

Os dejamos con  algunas de las fotos del día. Ya sabéis: si queréis verlas en grande, basta pulsar sobre ellas.



En la entrada del aparcamiento








Tres brujas salen a dar la bienvenida






Preparados para subir a la atracción del Hombre de Acero







Con uno de los "horroríficos" personajes del Parque




El espectáculo de "Loca Academia de Policía"





¡Esto es Halloween!





El Teatro Chino








Cientos de lugares donde sacar fotos






Calabazas en Cartoon Village





Batman hace frente al Joker






También es Halloween para los Looney Tunes






¡Menuda motera!






Igualitos... ;)






Todo lleno de simpáticos personajes






Junto a algunos miembros de la Liga de la Justicia






Una diligencia del Viejo Oeste






¡Nos hemos quedado muertos!



¡¡ ESTO ES TODO AMIGOS !!





domingo, 29 de octubre de 2017

¿Por qué decimos?

Despedirse a la francesa

Decimos que alguien se despide "a la francesa" cuando se marcha de un lugar sin decir nada, ni avisar. Parece ser que el origen de esta expresión proviene del hecho de una costumbre que surgió en la alta sociedad del siglo XVIII, de retirarse de una reunión sin despedirse de los anfitriones, llegando a considerarse de mala educación hacer lo contrario. Con el tiempo, se regresó a la normalidad, a aquellos que persistían en la costumbre de marcharse "sans adieu" (sin adiós), se les reprochaba que se despidieran "a la francesa".

Lo curioso es que en Francia existe el dicho de "filer à l'anglaise" (marcharse a la inglesa) para referirse a la misma muestra de mala educación, por lo que seguramente haya detrás de todo esto mucha de la histórica enemistad entre estos dos países...






domingo, 22 de octubre de 2017

Doce meses, doce mitos




Isis y Osiris

Roma no solo adoptó los dioses griegos para su propio panteón, sino que hizo lo mismo con muchos dioses y ritos egipcios cuando ambas culturas entraron en contacto. Gentes pragmáticas como eran, los romanos absorbieron los cultos mistéricos de Isis y su esposo, el dios de los muertos Osiris.

Isis y Osiris eran hijos de Nut, la diosa del Cielo, y Geb, el dios de la Tierra. Ambos reinaron sobre Egipto. A Osiris se le había encomendado el cuidado de las regiones fértiles, mientras que a su hermano Set le habían entregado el estéril desierto. Envidioso, Set decidió acabar con Osiris. Primero lo encerró en un sarcófago, pero Isis consiguió liberarlo. Después, Set lo mató y lo descuartizó, cortando su cuerpo en catorce trozos que desperdigó por Egipto. Isis se lanzó a buscar todos sus pedazos, y cuando los reunió, recompuso a su esposo y sobre su cuerpo muerto concibió a Horus, que estaría destinado a suceder a su padre. Osiris se convirtió en adelante en soberano de la tierra de los muertos.

En Roma, el día 26 de octubre se celebraba la ceremonia de Isis Doliente, por la muerte de su esposo. los misterios osiríacos se convirtieron en una representación de la resurrección de la tierra, y se le equiparó a Dionisos/Baco, el cual también regresó de la muerte en una ocasión.



Otoño dorado en la Tejera Negra

Existen lugares en los que el otoño parece mostrarse de manera especial, como si fueran santuarios consagrados a esta estación. El Hayedo de la Tejera Negra es uno de ellos, un sitio donde robles y hayas se visten de marrón y oro, en contraste con los pinares siempre verdes. Además es el hayedo más meridional de toda Europa, un bosque relicto testimonio de las últimas glaciaciones.

Si queréis conocer mejor este paraje encantado, en nuestro blog Un Ambientalista os contamos cómo fue nuestra jornada y las rutas que podéis hacer allí. Como muestra, os dejamos estas fotos...



















sábado, 14 de octubre de 2017

¿Qué harías tú?




"La chica de los prodigios", de Jason Mott, nos cuenta la historia de Ava, una niña que un día descubre un poder increíble dentro de sí: rescata de las puertas de la muerte a su mejor amigo. El problema es que alguien lo ha grabado y subido a internet, por lo que de la noche a la mañana su tranquilo pueblo se ve literalmente invadido por gentes que quieren verla, que quieren que explique cómo la ha hecho y que quieren que repita el milagro. Y hay otro inconveniente: cada vez que Ava usa su poder, su propia salud se deteriora.

Se abre así un espinoso dilema. Si Ava ayuda a los demás, se precipitará hacia su propia muerte, pero si no lo hace, se la llamará egoísta y se le echará en cara que no cure a los que han acudido al pueblo. La prensa la agobia, los líderes religiosos quieren atraerla a ella y a su familia hacia sus respectivas congregaciones, y Ava y su padre descubren que sus vidas cada vez les pertenecen menos...

Un libro ameno de leer, pero cuya lectura es más profunda de lo que parece. Y lo mejor de todo es que el autor no nos ofrece en ningún momento una respuesta fácil para salir del dilema.