Cargar con el mochuelo
Usamos esta expresión para indicar que a alguien le toca aguantarse porque se le ha asignado un trabajo desagradable, se le echa la culpa por algo penoso, o simplemente, que le ha tocado lo peor de un reparto.
El origen parece estar en una anécdota, posiblemente apócrifa, sobre un andaluz y un gallego que habrían llegado a una posada cansados y muertos de hambre, después de un viaje. El mesonero, cuando les atiende, les anuncia que lamentablemente solo le queda en la despensa una perdiz - ave muy apreciada por su carne tierna - y un mochuelo - mucho más pequeño, magro y duro. Cuando les pregunta qué va a pedir cada uno, el andaluz dice que traiga los dos, que ellos ya se lo repartirán en la mesa.
En fin, el posadero llevó ambos platos, y el andaluz declaró: "Bien, compañero, tal y como yo lo veo, o bien te comes el mochuelo y yo me quedo con la perdiz, o me como yo la perdiz y te cargas tú con el mochuelo."
No sabemos si el gallego se rebeló ante este curioso reparto o se tuvo que conformar con la escasa rapaz nocturna...
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