1. Usted siempre se verá obligado a coger el coche cuando mejor aparcado lo tenga, debido a un motivo banal que todos los demás consideran de vida o muerte.
2. Cuando le toque volver de atender ese asunto, será a la hora del día en que todo el mundo está en su casa y nadie piensa mover el coche para dejar un sitio libre.
3. Cualquier persona que vea con las llaves de un coche en ademán de abrir o cerrar una puerta, le hará inevitablemente la señal de que no se marcha.
4. El coche que va delante de usted también está buscando sitio, y por pura cuestión de física, lo encontrará antes.
5. Cuando vea un hueco disponible, se aplicarán una de las siguientes situaciones: a) Será vado b) Será reservado para minusválidos c) Habrá un contenedor de escombros de obras.
6. Si no se da ninguna de las circunstancias anteriores, el hueco será dos centímetros demasiado estrecho para su vehículo.
7. Los coches pequeños y las motos son colocados a propósito en sitios aparentemente libres para destrozar sus esperanzas.
8. En cualquier caso, está demostrado que el número de vueltas al barrio necesario para encontrar un sitio libre puede calcularse mediante la expresión V = T x P x N, donde T es el tráfico que exista en las calles en ese momento, P la prisa que tenga por llegar a casa, y N el número de niños molestos y con ganas de hacer pis presentes en el coche. Esta expresión se eleva al cuadrado si las condiciones atmosféricas son lluviosas.
9. La distancia entre el lugar de aparcamiento y su portal es directamente proporcional a la cantidad de carga que lleve en el maletero.
10. Cuando desande el camino a casa después de aparcar a kilómetro y medio de ella, encontrará un sitio perfectamente libre junto al portal de su edificio.