Con la Iglesia hemos topado...
Esta expresión viene de una cita extraída del segundo libro de "El Quijote", y se utiliza para referirse peyorativamente a instituciones poderosas, normalmente intocables y que resultan un obstáculo en el camino de uno.
La cita (a la que a veces se le añade la coletilla "Amigo Sancho") está sin embargo mal entresacada. Puede comprobarse que en original dice "con la iglesia hemos dado" (fíjate además que pone "iglesia", no "Iglesia" haciendo referencia a un edificio, no a la institución) y la dice Don Quijote cuando, en el pueblo del Toboso, andan buscando él y Sancho el supuesto palacio de la "Señora de sus pensamientos":
“Hallemos… el
alcázar -replicó don Quijote-… Y advierte, Sancho, o que yo veo
poco o que aquel bulto grande y sombra que desde aquí se descubre la
debe de hacer el palacio de Dulcinea”.
“Guió don
Quijote, y habiendo andado como doscientos pasos, dio con el bulto
que hacía la sombra, y vio una gran torre, y luego conoció que el
tal edificio no era alcázar, sino la iglesia principal del pueblo. Y
dijo:
“-Con la iglesia
hemos dado, Sancho-”