Con el año nuevo siempre se empiezan a hacer listas de propósitos por cumplir, pero la mayoría de las veces se terminan quedando en agua de borrajas... nosotros no somos de "grandes planes", vamos escribiendo nuestros días de uno en uno y según van saliendo.
Lo que sí que tenemos claro es que se avecina un 2015 frenético en cambios y que hemos llegado a un momento decisivo donde las cosas pueden empezar a ser diferentes. Dentro de esa vorágine de novedades lo más importante es no dejarse arrastrar por la marea, porque siempre hay que actuar con cabeza aunque el que mande sea el corazón.
Todos queremos que lo bueno llegue al fin, sin duda.
Pero debe llegar en su momento y de la mejor manera, no hay que precipitarnos en el entusiasmo desorbitado. Mientras tanto tendremos que continuar sembrando de proyectos, sueños y expectativas nuestra parcela, no debemos renunciar a abonar nuestro camino de vivencias nuevas. Y no hay mejor manera de hacerlo que con sonrisas, que tendrían que ser más poderosas y la mejor carta de presentación, pues aun en los peores temporales todo se ve distinto bajo el paraguas de una sonrisa. Decían por ahí que "Always look on the bright side of life" y no se equivocaban, no. La vida se nos escapa, se esfuma, es fugaz como los sueños y lejos de desperdiciarla hay que vivirla intensamente. Y comenzamos el año así, sonriendo para vosotros, pues aquí seguimos un día más, otro por escribir en esas páginas en blanco que abruman, mas que finalmente rellenamos y pasamos a la siguiente.
Aún nos queda mucho por contar, mucho que decir... os lo decimos todo así:
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