Hildegunst Von Mythenmetz ha nacido en la Fortaleza de los Dragones, y como buen dragón escritor que desea ser, emprende un viaje a la legendaria Bibliópolis para aprender los trucos del oficio. Pero Bibliópolis es mucho más que una ciudad: en ella, todo gira alrededor de la lectura. Por todas partes hay tiendas de librero de viejo, se hacen lecturas de libros en los cafés y los curtidos cazadores de libros se internan en las catacumbas en busca de los ejemplares más antiguos y valiosos, desafiando a los peligros del subsuelo.
Y es que, como acaba por descubrir Hildegunst, la parte subterránea de Bibliópolis puede ser un lugar muy peligroso. Hay cíclopes. Y harpyras. Y araññññas (no, nos hemos equivocado al escribir). Y enanos de la herrumbre. Y, por supuesto, el misterioso y mortífero Rey de las Sombras, con un secreto tremendo que espera ser descubierto.
"La Ciudad de los Libros Soñadores" es una auténtica delicia para los amantes de la lectura, y no solo por su original y divertidísimo argumento o las maravillosas ilustraciones a cargo del mismo autor. A lo largo de la obra aparecen desperdigados, como pequeños acertijos reservados al lector, escritores famosos camuflados como anagramas. Por ejemplo, tenemos al bueno de Oscar Wilde bajo la forma de Orca de Wils. ¿Quiénes crees que serán el tenebroso Perla La Gadeon, el romántico Ydro Blorn o el famosísimo Eseila Wimpershlaak?
¡Ah, se nos olvidaba! La numeración de los capítulos, escrita en la fantástica escritura zamonia, es otro pequeño desafío. Aquellos que lo leáis ¿seríais capaces de identificar a qué número corresponde cada signo? No es tan fácil como parece...
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