Esa gente que no soportas

Llega ya el fin de semana. Decimos adiós a la rutina y nos dedicamos al ocio. Siendo profes esa rutina es diferente, el trato con nuestros alumnos no tiene nada que ver con la realidad manifiesta de trabajar en empresas de postín. 

Por estas fechas, es tradición que las empresas organicen sus recurrentes eventos de cena-comida-fiesta de Navidad, donde, dependiendo de quién esté sentado/a a tu lado, salir victorioso/a del acontecimiento puede ser una aventura épica.

Para que os acoracéis y os preparéis para tan desigual batalla ante posibles insoportables elementos, y el resto del año no decaiga la moral, hay un libro especialmente creado para dar consejos sobre Cómo tratar con gente a la que no puede soportar. 

Todo experto en marketing y el mundo empresarial conoce seguramente su existencia. Es habitual que el departamento de RRHH en las prácticas de empresa con sus empleados ponga en juego este tipo de recursos.

Nosotros nos lo leímos para aprender más de la psicología de algunas personas con las que nos hemos topado a lo largo de nuestra experiencia laboral. Y también para echarnos unas risas viendo cómo mucha gente encaja en el perfil. Ofrece consejos para tratar con esas personas y sacar beneficio de sus manías.

Os hacemos un pequeño resumen para que entréis en materia. Si os interesa el tema, el libro está siempre a vuestra disposición.

Cómo tratar con gente a la que no puede soportar, cataloga a la gente insoportable en diez tipos diferentes. Algunos de ellos son: el sabelotodo, el tanque, los que siempre dicen sí, el quejica o los que no tienen nada que decir.

El sabelotodo: es una persona que tiene que exhibir todos sus conocimientos. Si sabemos aprovechar esto y le damos cuerda, podemos utilizarlo como una fuente de aprendizaje.

El tanque: es una persona que es arrolladora y que avanza para arrasar. Convencerlos sutilmente para que piensen que tus ideas son las suyas y así utilizar su fuerza para tu beneficio, es lo mejor que se puede hacer. Si consigues que el tanque se crea que él ha tenido una idea que es tuya, toda su fuerza va a estar a tu servicio.

Los que siempre dicen sí: son personas que están dispuestas a comprometerse con todo, pero luego no cumplen con nada. A estas personas las tienes que obligar a que seleccionen las decisiones que toman. El beneficio es que siempre están a tu favor. La desventaja es que, como dicen a todas las cosas que sí, al final no hacen ninguna. Deben implicarse y cumplir.

El quejica: es una persona que protesta por todo, lleva la contraria sistemáticamente. Con estos, como sabes que van a poner impedimentos, hay que convencerlos para que ellos den soluciones.

Los que no tienen nada que decir: son personas que carecen de toda iniciativa, les da igual todo lo que les digan, se sientan sin participar. Habría que persuadirlos para intervenir con el uso de preguntas abiertas (que han de ser respondidas con otras palabras que no sean ni SÍ ni NO). Podemos descubrir que las personas que no decían nada contaban con un montón de información útil que no estaban compartiendo.

Los otros perfiles eran tan insoportables 

que no los hemos puesto... 

Si vosotros habéis soportado todo esto, 

tenéis mucha  PAZIENCIA !!